Autobiografía audiovisual: Una manera de conectar
Desde pequeña el contenido que consumía tuvo un efecto enorme en mi identidad. Desde querer dejarme el pelo largo que toque el suelo hasta cambiarme la montadura de mis gafas a unas negras para parecerme más a un personaje. Y aunque cualidad que querer robarle los atributos de un personaje para mí misma fue un acontecimiento repetitivo en el pasado, no puedo decir que se haya eliminado al 100% en mi presente. Aunque mi dinámica con el cine haya cambiado.
Puede sonar grosero, pero no creo que podría tener una relación cercana con una persona con los gustos opuestos a los míos. No digo que esta persona tenga que ser mi clon, pero me he dado cuenta de que mi manera principal de conectar con gente es a través de las películas, series o videojuegos; especialmente de las que más esté fijada en ese momento.
Nunca me podré olvidar de esos días cuando invitaba a mis amigas a una fiesta de pijamas donde comprábamos pizzas para cenar, palomitas para completar con la finalidad de hacer un maratón de películas de alguna saga (sea Marvel, El corredor del laberinto o La casa de papel) mientras comentábamos en voz alta, reíamos y criticábamos a los personajes.Hay veces que soy capaz de ver una saga entera por un amigo, como cuando me vi una retransmisión del juego The Last of Us porque un amigo estaba muy emocionado con su adaptación a serie que acababa de salir, o cuando una amiga mía me invitó a un museo de Harry Potter así que me vi la saga entera en 5 días.
Puede ser que por este motivo siempre vuelvo a lo que conozco y pocas veces visito algo nuevo.
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